Dentro de la infinidad de lentes de contacto que existen y de las muchas características que tienen para poder corregir cualquier defecto visual, hay que hacer una mención especial a los sistemas de mantenimiento y limpieza que la gran mayoría necesitan para poder tener una adaptación favorable, confortable y con buena agudeza visual. Considero las lentes y los sistemas de mantenimiento como un todo, el cual tiene que trabajar a la vez para dar los resultados requeridos por los usuarios. Estos sistemas de limpieza son parte fundamental de las lentes de contacto y su correcto uso garantizan la adaptación ideal para la corrección visual, aunque a veces nos olvidamos un poco de ellas y nos pueden crear problemas. Hay que tener muy en cuenta que una mala limpieza puede evitar una tolerancia aceptable al uso de lentes de contacto y al tiempo que se pueden llevar y el deterioro de las mismas. La solución única se ha venido imponiendo en la adaptación de las lentes de contacto blandas, pero en ciertas ocasiones y con otros tipos de lentes de contacto, tanto por eficacia como por sensibilidad a estas soluciones únicas, la utilización de peróxidos sigue siendo muy útil, así como desengrasantes, pastillas enzimáticas y sistemas con ultrasonidos. Recuerda cuidar muy bien tus lentillas con los sistemas adecuados de limpieza y un consejo muy importante: ¡¡por favor cambia con regularidad el porta lentes!!
Los líquidos de las lentillas
